Puesto que el 5G se fundamenta en una espesa red de mástiles, y en una poderosa serie de antenas, posiblemente esta infraestructura, con ciertos pequeños ajustes, pueda ser capaz de trasmitir energía a dispositivos pequeños. Sin embargo, esta transmisión todavía tendría un inconveniente, que se observó en las primeras torres de Tesla: un elevado desperdicio de la energía, que podría ser complicado de justificar si tenemos en consideración la presente crisis climática y la emergencia en ponerle solución lo antes posible.
Hace bastantes años, los científicos descubrieron que un rayo de radio muy enfocado podía trasmitir energía a distancias parcialmente grandes sin el empleo de un cable para transportar la carga. Exactamente, es esta tecnología la que en nuestros días se emplea en internet 5G, puesto que la conexión a Internet a nuestro dispositivo inteligente se transmite mediante ondas de radio, las que son por su parte trasmitidas desde una antena local.