Un edificio vanguardista en Illueca
Illueca, un pequeño pueblo ubicado cerca del Parque Natural de Moncayo en Zaragoza, ha sido el escenario de una nueva construcción que destaca por su diseño innovador y el uso de materiales cerámicos de alta calidad en su fachada. Los arquitectos Permán y Franco han dejado su huella en esta localidad con un centro de salud de atención primaria que no pasa desapercibido.
Construido en un terreno de 1.400 metros cuadrados y con un desnivel de más de dos metros, el centro de salud se adapta a la topografía del lugar de manera inteligente. Siguiendo la alineación de la calle de acceso, el edificio se retrasa unos metros para crear una amplia acera con una marquesina que protege la entrada, añadiendo también un elemento estético distintivo.
La parte trasera del edificio cuenta con una plataforma diseñada para el acceso de servicio y el estacionamiento de vehículos. Este diseño compacto de cuatro plantas, sin pilares intermedios, permite la flexibilidad de realizar modificaciones en el futuro si es necesario.
Una fachada que desafía los convencionalismos
La verdadera joya de este centro de salud es su fachada ventilada, que ha sido cuidadosamente diseñada para destacar entre los edificios circundantes. Los arquitectos optaron por utilizar piezas de cerámica extrusionada de la reconocida marca Faveker, creando un aspecto único y distintivo.
La fachada combina hábilmente piezas cerámicas lisas y volumétricas con una textura metalizada que recuerda al titanio. Este juego de formas y texturas crea una composición visual fascinante, acentuada por la forma en que los marcos prefabricados se deslizan ligeramente sobre el plano de la fachada.
La brillante textura metalizada de las piezas cerámicas cambia su apariencia según la incidencia de la luz, lo que confiere al edificio un carácter camaleónico que lo distingue de los demás en el entorno urbano.
Sostenibilidad y rendimiento excepcional
La elección de la cerámica para la fachada no solo es estéticamente atractiva, sino también altamente funcional. La colección cerámica GA 16 utiliza un sistema de fijación mecánica que garantiza su durabilidad y resistencia a las condiciones climáticas extremas de la zona.
Además, la cerámica porcelánica extrusionada utilizada en esta fachada ofrece un rendimiento térmico excepcional. Esto es especialmente importante en una región donde las temperaturas pueden variar considerablemente. El sistema de machihembrado de las piezas protege la cámara de convección de la entrada de agua, evitando problemas de humedad y asegurando la conservación a largo plazo del edificio.
Una de las características más destacables de la fachada cerámica es su capacidad para reducir la demanda energética del edificio en un 40%. Además, este material es 100% reciclable y contiene hasta un 46% de materiales reciclados en su composición, lo que lo convierte en una opción sostenible. También es importante destacar que el sistema de la fachada es fácilmente desmontable y recuperable, cumpliendo con los requisitos de la economía circular.
Diseño adaptado a las necesidades
El diseño del centro de salud se ha adaptado cuidadosamente a los requisitos del programa sanitario y las limitaciones del entorno urbano. Con cuatro alturas, la planta baja alberga servicios e instalaciones, la planta baja se dedica a la administración, extracciones y urgencias, y las dos plantas superiores se destinan a las consultas médicas.
El Centro de Salud de Illueca es un ejemplo de cómo la innovación y el diseño bien pensado pueden mejorar la funcionalidad y la estética de un edificio. Poniendo de relieve la versatilidad y el potencial de la cerámica en la arquitectura, este proyecto ha dejado una huella duradera en esta pintoresca localidad española.