Como especie (Pantera pardus), los leopardos tienen múltiples subespecies, como los leopardos de Amur, leopardos de Java, leopardos de Arabia del Sur, leopardos de Asia Central y leopardos de Sri Lanka. Mas, a pesar de su nombre, el leopardo de las nieves (Panthera uncia) no es realmente un leopardo. Es un animal único y no hay otro gran felino como él en todo el planeta.
¿Dónde habitan?
Son nativos de las escarpadas y rocosas tierras altas de Asia Central, mas hay leopardos de las nieves en múltiples países, incluidos India, Bután, Rusia, Pakistán y Mongolia. Se piensa que la zona montañosa occidental del Himalaya (la zona de China) cobija la mayor cantidad de estas espectaculares criaturas. En China, acostumbran a vivir entre tres cero metros y cinco cuatrocientos metros sobre el nivel del mar mas en montañas más recónditas pueden ubicarse hasta a seis cero metros sobre el nivel del mar. Prefieren las zonas escarpadas y rocosas de las montañas para apresar y los barrancos y riscos para posarse.
Un pelaje fantástico
Una de las peculiaridades que más nos llaman la atención del leopardo de las nieves es exactamente su pasmante pelaje, amoldado de forma perfecta al helado entorno en el que bien. Su pelaje los sostiene apartados en tiempos fríos; no en balde, tiene un enorme grosor: puede medir cinco cm de largo en la espalda y los costados y prácticamente doce cm de largo en la zona del vientre. Su cola asimismo da un genial abrigo, ya que, además de ser útiles para guardar el equilibrio, asimismo les aportan calidez cuando se tumban y se envuelven en torno a sí mismos. La cola del leopardo de las nieves mide entre ochenta y ciento cinco cm de largo. Sus patas, por otro lado, grandes y pilosas, actúan como unas raquetas de nieve acolchadas. Su evolución le ha tolerado amoldarse para poder subsistir en las condiciones más extremas de la Tierra.